sábado, 17 de marzo de 2012

ONE SHOT. LOUIS TOMLINSON Y TU.

La tarde es cálida y las hojas de otoño caen suavemente sobre el suelo. (_____) baja de su escarabajo azul y suspira colocándose el pelo. El primer día de algo siempre te pone nerviosa. Recorre el pasillo exterior de su nueva academia y mira las instalaciones, todo es agradable.

(Narra (_____) )

 Escucho una especie de sirena que parece ser que marca el inicio de las clases, encuentro mi aula y veo que bastante gente ya está reunida dentro. Toco a la puerta y todo el mundo se gira.

 -Buenos días, soy (_____).- me presento.
-Hola.- dice una chica marcándome una ancha sonrisa.- soy Perry, soy la encargada de la compañía de teatro.
-Encantada.- sonrío.
-Ven, te presentaré al resto.- me guía hasta donde está todo el gentío y comienzan a saludarme.
-Chicos, ella es (____), será la suplente en la obra y hoy es su primer día, así que tratadla bien.

 Los saludé a todos y terminé presentándome a un chico moreno de ojos azul grisáceo.

 -Hola, soy (____).- digo sonando alegre.
-Encantado.- aunque no parece estarlo.- soy Louis.- me tuerce el gesto.- supongo que seré tu compañero de escena. Gracias por quitarle el puesto a la otra chica.- dice sarcásticamente.
-Pero…- ¿quitar el puesto?

 A mi tan sólo me habían llamado para hacer la sustitución en una obra de teatro. La chica en cuestión había abandonado al equipo.

 - - -

 Después de casi un mes me enteré del porqué de la bordería del chico. Al parecer le gustaba esa tal, Ellen, la cual les había dejado tirados a todos por hacer un musical a las afueras de Londres.

 -Vamos chicos, desde el balcón.- dice el regidor.

 Subo los escalones del balcón de cartón-piedra para hacer una de las escenas que da igual las veces que repitamos, es con Louis, y cualquier escena que hago con él me pone como una furia. Es demasiado perfeccionista, nunca le vale nada. Le veo ponerse en su sitio y me articula un, no te equivoques, entre dientes. Gruño y apoyo mi mano en mi mejilla, mientras las voz de Louis se cuela en lo más hondo de mí. 

-… si sus ojos resplandecieran como astros en el cielo, bastaría su luz para ahogar los restantes como el brillo del sol mata el de una antorcha. ¡Tal torrente de luz brotaría de sus ojos, que haría despertar a las aves a media noche, y entonar su canción como si hubiese venido la aurora! Ahora pone la mano en la mejilla. ¿Quién pudiera tocarla como el guante que la cubre?

 Cierro con fuerza los ojos y me meto todo lo que puedo en mi papel. Me relajo y comienzo a hablar.

-¡Ay de mí!.- suspiro. Seguro que si Shakespeare levantara la cabeza me diría con más tranquilidad que no lo he hecho del todo bien. No como este inútil que ya esta dispuesto a abrir la boca para decirme algo. Pero para mi sorpresa sigue con su parte.

-¡Habló! Vuelvo a sentir su voz. ¡Ángel de amores que en medio de la noche te me apareces, cual nuncio de los cielos a la atónita vista de los mortales, que deslumbrados le miran traspasar con vuelo rapidísimo las esferas, y mecerse en las alas de las nubes!

 …nubes, nubes, nubes. Sé que tengo que entrar, pero una vez más me he quedado en blanco. Joder. 

-Perdón.- me disculpo y hundo mi cabeza entre mis manos.
-Tranquila.- dice Charles, el regidor.- volveremos a intentarlo. 5 minutos de descanso.
-Gracias.- digo y bajo de mi sitio.
-Bonita, podrías darte cuenta de que no es tan difícil.- me recrimina.
-Ya he pedido perdón.- aprieto los dientes.- ¿qué pasa?, ¿nunca te has equivocado?
-Sí, pero llevas casi un mes aquí. ¿No crees que te podrías aprender las 2 frasecitas que tiene la escena.
-¿Dos frasecitas?
-Dos chorradas, no vengas con escusas. Yo sé lo mio, así que aplícate el cuento. Te recuerdo que esta obra se estrena en 3 semanas.- dice y tengo que coger aire frente a sus ojos azules.
-Te odio.- digo con firmeza y me voy a sacar una botella de agua de la maquina.

 - - -

 Estamos a una semana del estreno. Estoy terminándome mi sándwich en la cafetería, noto una mano en mi hombre y me giro con la peor de mis caras por si tengo que mandar a la mierda a mi estúpido compañero. 

-¿Qué?.- bacilo.
-(____).- dice Perry, la encargada.- ¿te molesto?
-No, no, perdón. Sólo ha sido… un mal día.- cuando pienso en Louis tiendo a eso.- Lo siento. ¿Qué ocurre?
-Veras, sabemos que aún estáis estancados en la escena del balcón. Ya he tenido esta conversación con Louis. ¿Podrías ensayar con él por las tardes?, os he reservado el teatro de 5 a 7.
-Sí, claro.- sonrío falsamente.- aquí estaré.
-Muy bien, nos vemos mañana.- se marcha.

 Trago el último bocado del sándwich y mi mente se nubla un poco. Idiota, idiota, idiota. ¿Cómo puedes ser tan idiota?. Sal de mi maldita cabeza.

 - - -

-¿Louis?.- pregunto entrando al teatro.
-Llegas tarde.- dice sin mirarme corriendo el telón.- son y diez.
-Lo siento.
-Tu solo sabes decir lo siento.- se gira torciéndome una sonrisa y se coloca bien el pelo. Por un momento creo que el foco de luz del centro me odia, porque no para de hacer que sus ojos se vean aun más bonitos de lo que lo son.
 -Te pido que no empecemos. Hagamos nuestro trabajo y en paz.- digo dejando mi bolso y subiendo al escenario.

 Y antes de subir de nuevo a ese prototipo de balcón de mala calidad sin querer coloco mal mi pie haciendo que tanto eso como todo el atrezo vuelque. Miro a Louis con los labios entrecerrados y pidiendo disculpas con los ojos.

 -No lo digas anda.- dice y se va a por los papeles.- toma.- me los tiende.
-No los necesito, lo sé de memoria.
-Eso es un logro.- sonríe. No sabía que podía sonreír de esa manera.
-Lo haré desde aquí.
-¿Y que otro sitio te queda?, te acabas de cargar el decorado.
-Que ya lo se.- me separo unos cuantos metros de él y cojo aire.
-(___).- pronuncia con tranquilidad.- No te equivoques.- dice y esta vez no me lo reprocha si no que me anima.

 Él comienza a hablar y sin quererlo me embobo como una idiota mirándole, escucho que dice lo de la maldita mejilla y me apremio para cruzarme de brazos y apoyarme sobre mi mejilla.

 -… ahora pone la mano en la mejilla. ¿Quién pudiera tocarla como el guante que la cubre?

-¡Ay de mí!.- suspiro y elevo la cabeza.

 -¡Habló! Vuelvo a sentir su voz. ¡Ángel de amores que en medio de la noche te me apareces, cual nuncio de los cielos a la atónita vista de los mortales, que deslumbrados le miran traspasar con vuelo rapidísimo las esferas, y mecerse en las alas de las nubes!.-mientras termina su frase no puedo evitar reírme un poco. Me acerco poco a poco, ya que sin el balcón de por medio puedo ensayar con él sin tanta distancia.

-¡Romeo, Romeo! ¿Por qué eres tú Romeo? ¿Por qué no reniegas del nombre de…- mierda.

-De tu padre.- dice Louis.

-Que sí, que sí.- suspiro.- ¿Por qué no reniegas del nombre de tu padre y de tu madre? Y si no tienes valor para tanto, ámame,.- y con esta inútil palabra que suelto una ola de calor me recorre la nuca, Louis se me acerca y clava sus ojos en mi, siento que me traspasa, que soy transparente. Que soy débil y pequeñita con su mirada pendiente de mí. Tartamudeo el final.-… y no… no me tendré por.- toso.- por Capuleto.

-¿Qué hago, seguirla oyendo o hablar?.- Louis se acerca más todavía y pasa mi pelo tras mis orejas. No le entiendo y mil sensaciones me recorren por dentro a la vez.

 -Louis… ¿qué haces?.- pregunto mientras él me corta el aire acercándose poco a poco a mi cuello.

-Eso no aparece en el texto.- sube y vuelve a mirarme a los ojos. Mando a la mierda lo de no entenderle. Mis rodillas tiemblan mientras noto el tacto de sus manos.

-Louis.- casi suspiro.

-Continua (______).- noto un leve beso en el cuello. Si pudiera soltarme de entre sus brazos le patearía en toda la entrepierna, pero es que no quiero que me suelte de entre sus brazos.

-No eres tú mi enemigo. Es el nombre de Montesco, que llevas. ¿Y qué quiere decir Montesco? No es pie…- vuelve a enfrentar a su boca contra mi cuello.- ni mano.- suspiro mientras coge mi mano y lo lleva hasta la altura de nuestro rostro. Entrelaza nuestros dedos y tengo que cerrar los ojos para intentar recordar lo que viene después.- ni brazo…- baja ambos tirantes, el de la camiseta y el del sujetador. Noto su húmeda boca recorrer mi hombro. Es extraño, pero necesito sus besos.-… ni semblante ni pedazo alguno de la naturaleza humana. ¿Por qué no tomas otro nombre?.- cojo su cara entre mis manos y le obligo a mirarme, pero mientras lo hace sus manos se están deshaciendo de mi ropa.- la rosa no dejaría de ser rosa, y de esparcir su aroma, aunque se llamase de otro modo. De igual suerte.- rebusco por sus caderas el enganche de los tirantes. Quiero desabrocharlo, quiero saborearle.-… mi querido Romeo, aunque tuviese otro nombre, conservaría todas las buenas cualidades de su alma,.- me vuelve a mirar, paso las manos por su pelo y me estremezco con el vaivén de sus dedos correteando por mi espalda.-… que no le vienen por herencia. Deja tu nombre, Romeo,.- tarda 2 segundos en trastear el enganche de mi sujetador, me lo quita y yo vuelvo a morirme por saborear su boca.-…y en cambio de tu nombre que no es cosa alguna sustancial…- tiro de su camiseta, me estorba tanta rayita, necesito sentir su piel contra la mía. De un rápido movimiento se la arrebato y la tiro con fuerza por los asiento de primera fila.-… Louis.- pronuncio su nombre, el cual claramente no aparece en ningún guión, ni si quiera en el de mi vida.- …tómame entera.

-Ves como si te podías aprender el papel.- dice pegándome a él. Ahora mismo mi cordura ha desaparecido. Mis 5 sentidos solo me repiten una palabra.

 Louis.

 ____narrador externo____

 -¿Qué estamos haciendo?.- pregunta ella muriéndose aún por probar los labios del muchacho.
-¿Qué crees que estamos haciendo?.- dice él casi riendo. Se escucha la cremallera de los vaqueros de (______).
-No te gusto.- dice deshaciéndose con un siguiente beso en el cuello que Louis le da.
-No te gusto.- afirma también él cogiéndole de las caderas.- pero aun así mueres por probarme.
-Chulo.- dice con seriedad.- eres un creído.- dice mientras mete las manos bajo los pantalones de Louis. Las pega a su trasero y se pone algo colorada viendo como el chico puede con ella y se está mordiendo el labio inferior.
-Te acabas de dejar desnudar por un chulo.- él introduce una mano bajo la ropa interior de (______), de los pantalones se ha deshecho en segundos.- por un creído.- dice en su oído. Ella coge todo el aire que puede mientras Louis le acaricia con picardía.- ¿Y bien?
-Que para ser un chulo eres muy lento.- (____) se relame los labios y coge la mano del chico indicándole que aumente la velocidad. Él baja la cabeza y le recorre entera con la mirada. Ella por un momento se frustra y agarra de nuevo la cara del chico.- eh.- dice como puede.- nunca he dejado que me bese ningún chulo.- ella se deshace de los slips de Louis cuando este para de jugar con su mano. Se yergue y se topa de nuevo con esa mirada azul grisácea.
 -No te creo.- dice él agarrándola del trasero mientras la recuesta sobre él en el frio suelo.
 -Siempre pido disculpas y siempre digo la verdad.- se acerca a su boca. Louis cierra los ojos y se adueña con ansia de sus labios.
 -Pues ahora dime una mentira.- dice y vuelve a besarla con ganas.
 -No quiero ser tuya.- Louis queda entre las rodillas de la chica. (____) baja hasta su abdomen y empieza a recorrer con su lengua el torso del chico.- Nunca seré tuya.- baja sus manos por el cuerpo de Louis.
-(_____).- Louis empieza a gemir su nombre. Nunca ninguna tía le había masturbado de esa manera. Era algo salvaje.- (_____).



-¿Me tienes miedo?.- dice el besándole en el pecho. Acaban de cambiar sus posiciones. Las caricias de Louis le están haciendo casi rozar el cielo.
-No.- le acaricia el pelo.
-¿Por qué tiemblas?.- le besa en el estómago y empieza a bajar la única prenda que les está separando de ser uno.
-Me haces temblar.- se levanta un poco y vuelve a besar al chico en los labios.
-Vuelve al suelo.- le acaricia el pelo de nuevo y le adapta de otra vez bajo él.
-Louis.- dice ella. Pues la chica que hace un momento estaba siempre dura y salvaje, se esta volviendo vulnerable.
-Shh.- dice él.- no pasará nada que no quieras que pase.

 (______) cierra los ojos removiéndose. Él chico sigue jugando con la lengua entre sus piernas mientras coge sus muslos con fuerza.


 -¿Por qué has sido así conmigo todo este tiempo?, tan borde…- dice ella acariciándole el torso mientras él se ha vuelto a adaptar encima.
-Por que ya fui dulce una vez, y me dejaron tirado a mí y a mi equipo. ¿Y si tu hubieras hecho lo mismo?
-Nunca.- le rodea la cintura con las piernas. Louis se amolda bajo su abrazo.- nunca.- suspira besándole en el cuello.


Y la única función que se esta representando en el suelo de ese teatro es la de una chica llegando a rozar el cielo a causa de un nuevo Romeo. Más chulo, mas prepotente quizá, pero un Romeo que está consiguiendo que se muera de amor.



jueves, 8 de marzo de 2012

ONE SHOT. ZAYN MALIK Y TU. PARTE 2.

Bueno, esta pedazo de segunda parte lo ha hecho una amiga. No es escrito por mi, la dueña del blog, si no por ella, Carol One Direction (en tuenti). Simplemente, flipante.

_______________________________________________-

Narra (______)

-Si tiene alguna objeción, quédese después de clase.

Y antes de girarse veo de nuevo ésa irresistible sonrisa torcida en su boca.Paso la clase tomando apuntes, mientras dicta las oraciones para traducir, noto sus ojos mirándome, pero tengo que ser realista, sólo ha sido un desliz, sólo una vez...Además que me he reconciliado con mi novio, suena el timbre que marca el final de la clase, recojo lenta las cosas, mientras todos devuelven los exámenes.

-(____), te espero en mi casa esta tarde para repasar-dice mi mejor amiga, asiento sonriente.

Todos se han ido, solo quedamos él y yo de nuevo.Me acerco a su mesa con mi pachorra habitual.

-Ve, señor Malik-le enseño el ejercicio realizado-está hecho.-Mantengo la distancia que nos separa, su mesa.Mientras él ojea el examen, sonríe.
-Sólo te puedo subir la nota medio punto, no tienes bien la mitad del ejercicio-dice él corrigiéndolo.-Necesitas repasar más, así que esta tarde aquí,(___)-suspiro resignada.Él mira a un lado, se levanta dejando sus gafas en la mesa, mira por la puerta, los pasillos están vacíos, hoy la gente ha salido una hora antes, por algo de una huelga de profesores.Zayn se acerca a mí,se apoya en la mesa y pega mi cuerpo al suyo.-O podemos empezar ahora-dice paseando sus manos entre mi cintura,mis caderas y mi culo.(____),tengo novio...me digo a mí misma.
-Señor Malik, llego tarde a una cita muy importante-me aparto,cojo mis cosas y salgo por la puerta, mi grupo de música estamos preparando una actuación para el viernes.

Mientras estamos ensayando la única canción que podemos cantar, la puerta se abre, Zayn...el señor Malik, es el encargado de estar con nosotros,me mira,lo noto, pero giro la cabeza a mi derecha para mirar a mi novio, el guitarrista del grupo.

-"What doesn't kill you makes you stronger..."-canto con fuerza el estribillo, sin dejar notar la mirada de deseo de Zayn, nunca me había sentido de aquélla manera, sólo Zayn sabía hacerme sentir de aquélla manera, ni mi novio...Acabó la canción y mi novio me dio un tímido beso en los labios.Ése beso no me transmitió nada en comparación con los de Zayn...

Termino de comer y me cambio, le he enviado un mensaje a mi mejor amiga avisando de las clases de repaso de inglés, que ya la ayudaría con literatura otro día.Llego al instituto y entro en la clase del señor Malik, allí está tonteando con una de las profesoras, debí imaginarlo, para él solo fue un calentón, que es lo que debería significar para mí...He comido pensando que si ése hombre me vuelve a hacer suya,dejaba a mi novio para estar disponible para cuando el quisiera...Pero me encuentro eso...solo soy una pobre ilusa,nada más.Miro el móvil mientras lo pongo en silencio mientras voy a mi sitio, dentro de tres días hago 18 años, dentro de tres días...Me siento y guardo el móvil. El señor Malik no hace amago de poseerme, lo miro extraña, pasando de la explicación, mi mano ha tomado apuntes, pero mi mente ha estado pensando que ésa misma mañana ha estado dispuesto a poseerme por segunda vez, y ahora que tenía la oportunidad no lo hacía...
Me marcho de las clases de repaso, me voy a ver a mi novio entrenar, me voy a acercar a él, pero una de las animadoras se acerca y le come todos los morros, me siento inútil, ya no me queda nada, me giro para irte por donde he venido, pasando por al lado del señor Malik,quien le pasa el brazo por los hombros a la profesora de antes.

-¡(____)!-grita mi novio.
-¡Olvídame!-digo aguantando las lágrimas,una mano me coge del brazo.
-Por favor...
-Déjame, por favor te lo pido, olvídame-me suelto y salgo de allí.

Voy andando por la calle, he parado de llorar, pero se nota que he llorado, voy a cruzar una calle cuando un Audi me corta el paso, es el señor Malik.

-(____), sube-dice.
-No, gracias, tengo piernas-digo.
-No me obligues a bajar de coche-dice, pero yo he echado a andar por la acera.Noto unas manos agarrándome la cintura y arrastrándome hacia atrás, el señor Malik me ha montado en su coche a la fuerza, cierra la puerta y me mira.
-¿Qué quiere, señor Malik?-digo.
-Creo que sabes perfectamente lo que quiero-dice antes de besarme, pero giro la cara aguantando las ganas de llorar.-¿Dónde vives?

Le doy mi dirección, y me deja allí.Bajo de su coche, y me encierro en mi cuarto, pensando en cómo ésa situación se nos ha ido de las manos al señor Malik y a mí, pensemos, es cinco años mayor que yo, son los años que se necesita para estudiar la carrera, pero aún dándole vueltas a todo aquél asunto, no encuentras explicación alguna...

Narra Zayn.

No vino ni jueves ni viernes, o por lo menos a mis clases, pero el viernes sé que no vino,porque cancelaron la actuación, se me ocurrió una locura, pero en fin, ya había cometido muchas en mi vida, por una más...El viernes fui a su casa a ver si la veía salir, y la vi, pero solo para despedir a sus padres, quienes iban cargados con maletas.Cuando el taxi de los padres se fue y ella entró en casa me bajé del coche y me encaminé a la puerta.Llamé al timbre.

-¿Qué se os ha...?-se le borró la sonrisa de la cara.-Se...señor Malik.
-Hola-dije mirándola de arriba a abajo, iba con una camiseta de tirantes, que dejaba ver los tirantes de su sujetador, también llevaba unos shorts de licra...-¿No me invitas a pasar?-sonreí torcidamente.

Se lo pensó por varios segundos, pero me dejó pasar.La casa estaba llena de fotos de ella de pequeña, de un poco mayor y en su último cumpleaños. Estaba bastante bien decorada la casa, su madre tenía un gusto excelente.

-¿Qué quiere señor Malik?
-¿No puedo pasar la tarde contigo?-dije.
-Señor Malik-dijo evitando mi mirada-, no está bien...Soy su alumna...
-Y yo tu profesor-terminé la frase-pero queda poco para el verano, queda poco para que ya no nos veamos todos los días.¿No has pensado en arriesgarte?Porque para mí es una idea muy atrayente,-me acerqué a ella, ella retrocedió hasta la pared, (___), me lo estás poniendo en bandeja-me atrae casi tanto como lo haces tú-dije acorralándola entre la pared y mi cuerpo.
-Y,¿qué pasa cuando vaya a la Universidad?-dice suspirando.
-Iré a verte, o te llevaré a mi casa-pongo una de mis manos en su muslo-hay soluciones,(____)
-Zayn...-cada vez que pronuncia mi nombre me vuelve loco-,¿hasta cuándo lo ocultaremos?-sus manos están acariciando mis abdominales.
-Hasta unos meses después de que entres en la Universidad.-ella se muerde el labio justo en el momento que mi mano la hace vibrar,moviéndose por lo más íntimo de su ser.

Narrador externo

Zayn bajó sus labios hasta su cuello,lo besó,pasó su lengua le pegó leves mordiscos en el cuello, esta vez pensaba hacerlo con sentimiento, pero sin dejar de rendir culto a todas y cada una de las partes del cuerpo de (____).Podía oír los suspiros de la chica, pues notaba el placer que le daba con su mano en la entrepierna de ella y con los besos propinados a su cuello.Fue a besarle en los labios, pero cuando fue a hacerlo notó una de las manos de (____) frotando su miembro,se sorprendió de aquéllo, miró a la chica a los ojos, estaban llenos de pasión, de lujuria, de puro sentimiento, a Zayn esto le encantó.Pues es lo que siempre había deseado, una mujer que fuera puro sentimiento.

(____) quería que Zayn la llevara a arriba y la hiciera suya durante todo el fin de semana, quería sentir sus labios, la otra vez fue él quien se abalanzó, por eso notó sorprenderse a Zayn cuando le comió la boca, mandando ella sobre su boca.Quiso hacerle sufrir un poco a Zayn, por eso subió las escaleras,oyó a Zayn seguirla por eso sonreía.El chico la alcanzó,y ella le guió hasta su habitación, las manos de Zayn agarraron a (____), por la nuca y la besó hasta llevarla a la cama, hasta tumbarla en ella, le quitó la camiseta y besó cada centímetro del cuerpo de la chica, se entretuvo en los pechos de ella, mientras ella se deshacía de la camiseta de Zayn. (___) hizo que girasen quedando ella encima,comienza a besar el torso de Zayn, notó las manos de Zayn en su trasero, miró a Zayn y le besó pasando su lengua por los labios del chico.

Zayn la hizo girar, se deshizo de los pantalones de ambos, de sus propios calzoncillos y del tanga de la chica.Las embestidas esta vez eran pasionales, eso es lo que le estaba transmitiendo Zayn a ella, mientras la besaba, ambos ahogaban los gemidos en los besos...

VARIOS AÑOS DESPUÉS...

(____), estaba sintiendo un dolor punzante, y agarró la mano de él.

-(____), respira, cariño-dijo Zayn besándole en la frente.

La mirada de (____), estaba nublada por las lágrimas, mientras hacía lo que le pedían, respirar y empujar, todos los momentos vividos junto a él se arremolinaban en su mente, la primera vez que le vio, lo que pasó entre ellos, su graduación, su primer día de universidad, los san valentines, los cumpleaños, las peleas, las reconciliaciones, la vez que casi rompen, el día en que él se presentó en su casa como su novio, las palabras bonitas que le dedicó, los besos que le ha robado mientras estudiaba, las caricias para despertarla,el día en que le pidió matrimonio, la noche de bodas....Y ahora estaba con ella, besándole en la frente, aferrando su mano, diciéndole que ya está que no queda nada...Un último empujón y oyes el llanto de tu bebé, de tu primer hijo, le miras y luego ves cómo Zayn lo coge en brazos y te lo acerca, te besa en los labios, presentándote a tu pequeña belleza morena...

miércoles, 7 de marzo de 2012

ONE SHOT. ZAYN MALIK Y TU.


Te ajustas la chupa de cuero mirándote en el gran espejo de tu edificio, revuelves un poco tu pelo intentando que se te quede bien y conectas tus cascos al iPod. Echas a andas al ritmo de, Drunk, de Ed Sheeran por la gran avenida que separa tu instituto de tu chalet. Miras la agenda, tú y tu despiste de no recordar tu horario y te aseguras de al menos llevar alguno de los libros de las asignaturas que te tocan ese día y si no ya te pondrás con alguien. Física y química, mates, inglés… bah, el de inglés no lo tienes, tu profesora cogió la baja por maternidad y aún no han mandado ningún sustituto. Sigues revisando, historia y la última hora serán prácticas en el laboratorio. Llegas al instituto, tu aula está medio vacía, ya estás terminando segundo de bachiller y la gente que falta se ha ido al viaje de estudios de Italia.

Cuando llega la hora de inglés estás sentada con una de tus amigas, una de las que no se han ido de viaje. Estáis hojeando una revista y todos los que estáis en clase no paráis de armar jaleo. Suena el segundo timbre que indica el inicio de las clases y nadie le da la más mínima importancia.

¡PAM!

Se escucha un golpe, algo acaba de chocar contra una mesa. Automáticamente todos miráis hacia la mesa, ¿eso significaba que habían traído un sustituto?

El tio esta plantado al lado de la mesa con los brazos cruzados, todos a tu alrededor cogen sitio. Los murmullos siguen, pero a causa de la atenta mirada del sustituto de inglés se desvanecen poco a poco.

-Así está mejor.- dice seriamente. Acto seguido se va al primer nombre de la hoja y empieza a pasar lista. Tu mente se pierde porque te distraer con una de tus pulseras.- ¡(______) (__tu apellido___) ¡
-Aquí.- dices girando bruscamente la cabeza para mirarle.
-¿Acaso está sorda?
-No.- recalcas.


Dos semanas ya con el imbécil del sustituto y no aguantas. Todos los días examen de algo, preguntas orales, redacciones… es un capullo que ha llegado sólo por y para joderos pero bien.

-Señor Malik.- escupes con asco, encima le tenéis que llamar así.
-¿Sí?, ¿necesita algo (____)?.- te mira por encima de sus gafa pasta negras, quitando la mirada de su montó de papeles.
-No entiendo el ejercicio 14.- dices y te levantas.
-Déjeme ver.- te acercas a su lado para darle tu hoja de archivador con las preguntas. Aspiras un aroma masculino que sin duda proviene de su cuello. Huele demasiado bien, hasta tienes que morderte un poco el labio.- es sencillo (_____). Sólo es la pasiva, ¿sabes cómo se forma la pasiva no?
-Sí, claro, sólo que me lio en este.- te agachas un poco y le señalas la frase. Tu mano roza un poco la suya, tu profesor de inglés gira un poco la cara y la eleva mostrando un sonrisa torcida, sientes un calentor en la nuca.
-Pues es la más fácil.- dice y coloca su mano sobre la tuya. Coge tu dedo con tranquilidad y lo extiende. Lo hace danzar por la hoja diciendo al mismo tiempo lo que tienes que cambiar de sitio.-¿y así?, ¿lo entiendes?
-Sí.- no.
-Necesitarás estudiar más (_____).- dice pillando tu mentira.

Haces una mueca mientras asientes y te vuelves a tu sitio.


Es el último examen y lo estás dando absolutamente todo. Sabes que te está yendo bien, pues te lo has preparado bien. Oyes el timbre y te da igual, sigues porque te queda una pregunta. A los 5 minutos te das cuenta de que eres la última en clase.

-No tengo todo el día.- dice desde su silla. Y por primera vez ves una de las facetas de tu profesor que hace que pases de sentirte como una adolescente como otra cualquiera, a querer sentir que ese capullo que tienes delante se fije más en ti. Y es que se quita sus gafas para colocarlas en la mesa y se pasa la mano por el leve tupé de color negro que lleva, se lo remueve hacia el lado y ves como el pelo empieza a caer con rapidez de nuevo en su sitio. Te estás quedando embobada.
-Sólo me falta una pregunta más.
-De nuevo la pasiva (____).
-Aha.- respondes.
-Creí que te había quedado claro la primera vez.- se levanta y se acerca a ti. No sabes si es el suelo o tú quien empieza a temblar.
-No, no me quedó muy claro señor Malik.- dices ya cuando llega a tu lado. Se gira y mira hacia la puerta cerrada. No queda nadie por los pasillos.
-Vamos a ver.- te coloca entre sus brazos y tu pegas las manos a la mesa. Su cabeza queda a la altura de tu hombro y mira el examen, aunque tu no puedes apartar la vista de esa maldita sonrisa torcida y esos ojos marrón chocolate.- si ya casi lo tienes.
-Eh.- dices perdida en esa sonrisa.
-La pregunta.- su boca casi roza la tuya, os separas centímetros.- casi la tienes.- notas su mano a la altura de tu cadera.

¿Coherencia?, eso que es, eso te acaba de abandonar completamente. Él es un profesor, tú eres su alumna. Ilegal, prohibido, penalizado… atrayente.

-Te dije que era fácil...- su mano ya roza tu tripa por el interior de la camiseta. ¿Le vas a parar?, estás a tiempo. ¡Decídelo!, una denuncia y fuera el ejercer en la enseñanza o….- que era muy sencillo.- o nada, porque no has decidido lo correcto, y su mano ya está bajo tu sujetador.- que el orden es fácil.- esas palabras las pronuncia en tu oído al mismo tiempo que te aprieta con suavidad en el pezón.- pero no me hiciste caso.- tu comienzas a levantarte cabizbaja y sin abrir la boca, porque como la abras vas a gemir y eso te avergonzaría frente a tu profesor.- ¿qué dije?.- esta vez ha introducido la otra mano. Esta recorriendo con ganas tus pechos y no hace más que susurrar esas cosas.
-Que.- respiras.-… que estudiara más señor Malik.
-Pues muy mal (_____).- te gira y te pega con fuerza a él. Notas, lo que parece ser, su mejor arma de trabajo entre tus piernas.- te voy a tener que mandar a clases de repaso.- eleva tu cabeza y te vuelves a encontrar con esos ojos mirándote con pasión. Te olvidas de tu edad como adolescente, la mujer que llevas dentro quiere salir, quiere que ese imbécil le haga suya.
-No me gustan…- tu primer suspiro, uf, y justo cuando ha metido la mano bajo tu falda para apartar tus cullots.-… las clases de repaso.
-Pero tienes que repasar.- se relame los labios.
-Si eso es lo que necesito….- su mano se sigue moviendo con soltura bajo tu falda y empiezas a notar las vibraciones que está produciendo en tu cuerpo.-… si es así. Ayúdame con el examen.- te da suaves empujones hasta la mesa.-… necesitaré ayuda… Zayn.
-¿Me estás llamando por mi nombre de pila?.- dice severo sentándote en la mesa.
-Zayn.- susurras en su oído y le muerdes el lóbulo de la oreja. Le agarras de los hombros y recorriendo su brazo hasta su mano se la coges para llevarla de nuevo hasta donde hace un momento estaban bien colocados tus cullots.
-¿Eh?.- vaya, esta vez el que se ha perdido en el momento ha sido él.
-¿No puedo llamarle Zayn, profesor?
-No.- se acerca a tu odio y al mismo tiempo que se deshace de tu camiseta vuelve a susurrar.- no dejes de llamarme así.



___narrador externo___

Ella acaba de encontrar su punto débil. Zayn. En ese momento sabe que quiere que ese hombre la posea. Las manos de (______) desabrochan con soltura pero a la vez timidez los botones de la camisa, pues va a seguir sintiéndose un poco avergonzada. Cuando se libera de la camisa, Zayn deja ver un torso formado, provocativo, seductor, así que ella empieza a perder la cordura. Divisa dos tatuajes, uno a la altura del pecho y otro en la cintura. Se decide para empezar por el del pecho. Primero se lame el labio inferior y después se lanza contra el tatuaje. Lo besa con la pasión que ese hombre acaba de crear en ella. El chico le levanta la cabeza, y se acerca hasta su boca. Se quedan un poco separados y ella empieza a odiar con todas sus fuerzas el que no le coma la boca.

-Para hacer una clase de repaso necesito repasar, ¿no crees Zayn?.- dice ella. Y justo cuando pronuncia, Zayn, los sentidos del chico se activan, choca su boca contra la de (_____) y baja al mismo tiempo sus cullots.

El chico vuelve a marcar su sonrisa torcida antes de abrir las piernas de (_____) y esta empieza a dar suspiros acariciando el pelo del chico. Zayn se desabrocha los pantalones y deja que su erección… esto… respire.

-Dilo.- pide recorriendo el cuello de la chica con su lengua y tocando su pelo.
-¿El qué?.- sus dedos ya están recorriéndole entera por dentro.
-(______).- dice su nombre al mismo tiempo que lanza un suspiro en su oreja.
-Zayn.- dice encendida.- Zayn.- ella saca la mano del profesor de su interior y se pega fuerte contra su paquete. Está bastante duro, así que ella sonríe con picardía apretándose mucho más. Ve como ese hombre, el único que la está haciéndose sentir verdaderamente mujer, le vuelve a mirar fijamente a los ojos. Ella no puede casi articular la palabra, así que lo dice mediante una cogida de aire.- Zayn.

Se abalanza contra ella y antes de que la chica pueda, si quiera, agarrarle empieza a embestirle con rapidez. Ella se agarra fuerte de su cuello procurando no caerse y se vuelve a dejar deleitar por ese aroma. La mesa está moviéndose con ligereza de atrás adelante, ambos lo están provocando, ¡PUM, PUM, PUM!, pasión, ¡PUM, PUM, PUM!, algo prohibido, ¡PUM, PUM, PUM!, deseo…

(…)

___narra Zayn___

Termino de corregir los exámenes y vuelvo de darle un trago al café. Miro el reloj, ya son las 10 de la mañana y entro ha trabajar a las 10 y media. Subo a mi Audi y dejo sonar la radio en una emisora cualquiera. Llego a un semáforo en rojo, sin duda el más eterno de esta avenida. Vuelvo a echar un vistazo al examen que está más arriba. Hmmm,  8,5… no se tenía que haber dejado en blanco el ejercicio de frases pasivas.

Al llegar a clase procuro no mirarle directo a los ojos y se nota como ambos hemos olvidado, o intentado olvidar, lo que pasó hace unos pocos días. Cojo todo el montón de exámenes y empiezo a nombrar uno por uno. Dejo el suyo para uno de los últimos y cuando termino de repartir me siento en la silla. Si alguno tiene alguna duda con su nota que pregunten.

-Señor Malik, no estoy de acuerdo con mi nota.- dice la única voz que ha conseguido hacerme carraspear.
-¿Cómo?.- le miró, está perdida en la última fila.
-Que no merezco el 8´5.
-Lo siento, (____). Debió realizar el último ejercicio.
-¿El de la pasiva?.- pregunta inocente y termina mordiéndose el labio.
-Exactamente señorita.- me giro y comienzo a escribir en la pizarra la lección del día.
-Perdón.- dice ella, casi tuerzo la línea que estoy haciendo para subrayar el título.- pero es que, sí hice el ejercicio… Zayn.

Y toda la clase se queda en silencio. Aprieto los dientes, muevo la cabeza para mostrar una falsa señal de enfado y me giro con severidad.

-Si tiene alguna objeción, quédese después de clase.

___narra (_____)____

-Si tiene alguna objeción, quédese después de clase.

Y antes de girarse veo de nuevo esa irresistible sonrisa torcida en su boca.




domingo, 4 de marzo de 2012

ONE SHOT. HARRY STYLES Y TU.

-Joder mama, dile a mi hermano que baje un momento.- dices cabreada.
-Tu hermano se está cambiando que se va con sus amigos.- dice desde la sala de estar.
-Pero no me apetece, voy en pijama.
-Venga, antes de que cierren, ponte un chaqueta. Por dios hija mía, que esta aquí al lado.

Uf, que asco. No puedes estar tranquila ni los domingos por la mañana, en los que lo único que te apetece es estar en pijama, gandulear y chatear con tus amigos. Llevas unos pelos de loca y no tienes las más mínimas ganas de vestirte para ir a por el pan. Por ti como si no comíais, ¿qué más daba?

A regañadientes por supuesto, arrastras tus pies hasta tu cuarto y te quitas el pijama, te colocas unos pantalones de chándal que te quedan bastante anchos a la altura de las rodillas y una sudadera 2 tallas más grande que tu, pues aunque hace sol se nota el frio de marzo.

Pasas a la cocina y tu madre ya te ha dejado el dinero en la mesa, te lo metes en el bolsillo de la sudadera y le metes un par de gritos a tus padres.

-¿Cuántas compro?
-Dos barras que no estén muy cocidas.
-Vale, ahora vengo.- vuelves a suspirar y cierras casi de un portazo dando entender un, “me habéis molestado mi fin de semana”

Llegas a la panadería y hay una cola tremenda, te das cuenta de porque odias ir a comprar el pan los domingos, todo el mundo se pone de acuerdo a la misma hora para ir.

Por fin parece que se vacía la panadería y avanzas hasta el mostrador, antes de que el dependiente se gire, pues esta programando el horno, te pones a mirar todas las cosas ricas que hay en el escaparate de abajo, si todas esas que gracias a tu alergia a la lactosa no e puedes comer, sí, vaya una mierda.

-¿Te pongo algo?.- dice una voz.

Alzas la cara para encontrarte con unos ojos verdes y unos hoyuelos en las mejillas. Lleva un gorrito blanco, bastante ridículo a decir verdad y unos guantes azul claro para no quemarse cogiendo las cosas. Le repasas por unas milésimas de segundo. El polo negro del uniforme le marca a la altura de los brazos, no, no esta nada mal. ¿Qué si me pones algo?, hombre pues sí, bastante.

-Esto sí, dos de esas.- señalas al sitio donde están detrás de él.- pero que no estén muy cocidas.
-Un momento.- dice y se gira a por lo que has pedido. Le repasas esta vez por detrás y marcas una sonrisa al llegar al culo. El chaval esta, ¿cómo sería la palabra?, ¿comestible?, hmmm, podría ser.
-Gracias.- coges la bolsa y le tiendes el dinero. 
-A ti.- contesta, pero lo hace cuando ya estás saliendo de la tienda. Notas que te ha mirado, más bien que he repasado.


Al domingo siguiente ni siquiera te piensas lo de quedarte o no en pijama, sabes que te van a mandar igual, así que te vistes justo después de levantarte y te acercas a la cocina.

-¿Dónde vas?.- pregunta tu padre.
-Pues como sé que me vais a mandar a por el pan, me he vestido ya.
-¿Pan?, pero si lo he comprado yo esta mañana.
-Ah, pues nada, me voy a cambiarme.

Joder, para un día que te ofreces tu a ir y resulta que ya lo han comprado ellos. Hmm. Te da igual, no te cambias, te quedas vestida y rebuscas dinero por tu bolso, encuentras lo suficiente para ir a comprar una barra de pan, que no sabes lo que harás con ella, pero tus únicas ganas son volver a ver a ver al dependiente.

Sales de casa diciendo que vas a casa de una amiga antes de comer y que pronto estarás de vuelta. Llegas hasta la panadería y te sorprende el hecho de que esta vez no hay nadie. Y él, ¿estará?. Despejas dudas y entras, no hay nadie. Miras por todos lados, o preguntas o nadie saldrá a atenderte.

-Hola, ¿hay… alguien?.- preguntas mirando al mostrador de las tartas, son bonitas y están muy bien decoradas.
-Ay perdona cariño.- dice una mujer saliendo de la trastienda preocupada.- estábamos preparando un pedido y no nos hemos enterado.
-No se preocupe, tengo tiempo.- dices y te sonríe.
-¿Qué necesitas?.
-Una barra.
-Aún no han terminado de hacerse, le quedan cómo.-mira su reloj.- 10 minutos. Puedes esperar aquí o volver en un ratito, te la guardo.
-No, tranquila, esperaré.

Hoy el día te salía mal, sin duda. Habías ido para absolutamente nada, pues él no estaba. Esperar el tiempo que te ha dicho, no te vas a ir ya que has pedido.

-¿Esto es para ti?.- reconoces la voz y levantas la cara sonriente.
-Sí, creo que sí.- dices y él te tiende la bolsa.
-Ten cuidado, no te vayas a quemar.- dice con una sonrisa tremendamente provocativa.- Esta, muy, caliente.- notas como separa esas estúpidas sílabas.

Tu, yo, decidido habría respondido que, “sí, caliente, como tu”, y tu, yo, normalito habría respondido un, “ay, pues muchas gracias”. Pero tu boca suelta lo primero que se te ocurre.

-Me gustan calientes.- dices y te muerdes el labio al sonreír.

Él no responde, y eso te lleva a pensar que lo que has dicho le ha sacado un poco de sus casillas. Antes de salir escuchas la voz de la mujer.

-Harry, cariño, ya sabes el tiempo que le queda a esto. Me voy a casa, te dejo las llaves en tu bolsa.
-Vale mamá, adiós.- contesta él mirándote con los ojos entrecerrados.- eh.- dice refiriéndose a ti.
-¿Sí?.- dices inocente acercándote a él.
-Que se te ha olvidado pagar encanto.- responde apoyándose en el mostrador y acercándose a ti.
-Se me ha olvidado el dinero en casa, perdón por mi despiste.- te encoges de hombros y te pasas el pelo tras la oreja.
-Y entonces, ¿cómo piensas pagar?.- se acerca más aun tras el mostrador, alternando su mirada de tus ojos a tu escote.
-Ah, pues no lo sé.- miras hacia la puerta dándole a entender que está abierta y que todo el mundo que pasa os está observando.
-Pues entonces me parece que no saldrás de aquí hasta que pagues las deudas.- baja la persiana de la tienda al salir del mostrador y se gira a ti aún en el suelo con una rodilla apoyada.- no está bien ser una morosa.- se levanta.
-¿El legal dejar encerrada a una persona por una miserable barra de pan?.- dicen cuando se acerca tu altura.
-Legal no lo sé.- te agarra del trasero.- pero sí apetecible.
-Creo que ahora más bien puede considerarse secuestro.- pasas las manos por su vientre, a tu pesar, por fuera de la camiseta.
-Entonces ya puedes considerar lo siguiente como una violación.- te mira los labios.

Y de un movimiento rápido te encuentras sobre el mostrador, con ese tal Harry, recorriendo a besos y mordiscos tu cuello. Lo ha hecho sin besarte en los labios en ningún momento y eso te ha dado bastante rabia. Coges su cara dándole a entender que tiene que parar y se le pone una cara de enfurruñado que te hace enloquecer más todavía.

-¿Acaso quieres un beso?.- te aprieta contra él y tu coges aire.
-¿Así tratas a tus rehenes?.- le tiras del pelo hacia atrás.

No esperas. Te lanzas a por su boca en el momento en el que él ha bajado la guardia. Se separa de ti y cada vez que intentas volver a encontrar su boca él no te lo permite.

-Me gusta más cuando lo piden.- dice torciendo la sonrisa.
-Nunca cumplo con las expectativas.- bajas la mano por su torso y llegas hasta su entrepierna. Tu mano se mueve de arriba abajo hasta que gracias a un mordisco que le propinas en el cuello notas el cambio de tamaño entre tus dedos por fuera de su pantalón.
-Eres la mejor prisionera que he tenido en mi vida.- dice pasándote el pelo tras los oídos y atrayendo tu cara para besarte con fuerza en los labios. Apenas te deja coger aire y le tienes que volver a tirar el pelo esta vez para poder respirar.

Te baja y te guía hasta dentro, dónde no tendréis más espacio que el suelo o una encimera en la que sólo hay moldes para magdalenas. Decides la encimera pero él ya ha escogido, adivinando tu pensamiento y te empuja contra la encimera. Te ves obligada a poner las manos en el mármol e inclinas un poco la espalda. Sus cálidas manos pasan bajo tu camiseta recorriendo tu tripa y baja tu sujetador. Al mismo tiempo que notas como te agarra con fuerza de los pechos sus labios marcan un chupetón en tu cuello.


___narrador externo____

Ella se estremece bajo sus brazos, ¿qué se puede esperar de un chico con tanta práctica?. Consigue hacerla gritar con solo acariciar por fuera la parte más intima de su cuerpo. Le gira, le hace que mire sus ojos, pues le provoca más excitación que el hecho de que ella esté de espaldas. Harry le quita con ganas la ropa, pone sus manos en las caderas de (_____) y ella ríe divertida. Cambian los turnos. La mano de (_____) tira con fuerza del polo negro de Harry y se lo arrebata. La poca barrera que los separa son los vaqueros del chico y las braguitas de (_______). Ella los desabrocha y los pantalones caen al suelo. Esta vez sólo quedan los boxers. Antes de que (_____) tenga tiempo a llegar a rozarlos Harry la empuja hacia atrás hasta pegar su espalda contra la pared, agarra sus muslos y le hace quedar medio tumbada. Baja las braguitas de (_____) sin dejar de mirarla a los ojos, y eso hace que ella se excite más todavía.

La chica agarra con fuerza el borde del mármol helado, la lengua de Harry está recorriéndole con práctica entre las piernas y no puede, ni quiere, dejar de dar esos gritos ahogados. Sube besando su estómago y esta vez lo que se encuentra recorriendo sus pechos no son las manos del chico si no sus besos.

Se da cuenta de que no tiene ni un puñetero condón en la cartera, claro, ¿quién va a una panadería con condones en la cartera?.

-Para.- dice ella bastante jodida.- Para.- esta vez lo dice gimiendo.- … para.- vuelve a pedir.

Pero el chico no le hace caso, sabe que él si que lleva protección pero es mayor la excitación que le provoca el que ella este preocupada.

Es la cuarta vez que ella le pide que pare y él la hace callarse, primero le muerde en el labio inferior y después empieza otro de sus besos que comienzan a dejarla sin aliento. Baja los dedos por la tripa de (_______) y antes de que sus dedos se encuentren en el interior de ella le vuelve a sonreír. A ella se le corta la respiración, el ritmo de la mano de Harry se puede calificar con la palabra, maestría. Aunque intente volver a pedir que pare no va a ser posible, ni él parará ni ella podrá evitar lo que va a pasar el escasos segundos.

La rapidez y pasión de los dedos del chico provocan que (_____) se corra por primera vez. Ella respira con fuera y una vez más le tira de el pelo, se le encarama y casi temblando intenta abrir la boca. Él le tapa los labios con una mano y con la otra muestra el preservativo que acaba de sacar de uno de los bolsillos del pantalón.

Ella sonríe aliviada y dispuesta a atravesar la única barrera que queda entre sus dos cuerpos. Se baja de la encimera y desliza con tranquilidad el condón. Se escucha un fuerte gemido del chico, eso le provoca más ganas a (_______) de seguir haciéndole gritar. Antes de que él la vuelva a levantar para conseguir entrar en su mundo, (______) coge el gran abultamiento de Harry entre sus manos y juguetea haciendo que la respiración del muchacho no cese. Decide ser justa, y también utiliza su boca esta vez provocando que él mueva la cabeza de (______) de adelante atrás. 

Se levanta, todavía juguetona y enreda sus manos por los rizos de Harry dándole a entender que podrá llegar hasta donde él quiera con ella. Le besa con toda la pasión que ella está acumulando en su cuerpo y mueve la cabeza con soltura hacia atrás. Él ya juega en otro territorio, ya sólo les separan unos milímetros de latex. Clava los dedos en el pecho del chico y se deja estremecer por los vaivenes que le produce ese miembro entre sus piernas. 

La está agotando y el vaho que ambos desprenden en aquella pequeña sala está dejando empañado uno de los cristales. Levanta a (_____) con ganas y la pega justo a ese cristal, su cuerpo desciende de nuevo de arriba abajo dejando la marca en espejo. Ambos saben que no queda mucho para llegar al final, y el que Harry haya aguantado casi 10 minutos la ha dejado bastante impresionada. Antes de que ella vuelva a gritar, a temblar, a estremecerse entre los brazos del chico, este la gira haciendo que toda su delantera roce contra el frio del cristal. Se ven reflejados, y aunque esta vez ella esté de espaldas no hay cosa que más le vuelva loco que el hecho de ver como ella está gimiendo y gozando gracias a él. 

(…)

Han pasado más de 45 minutos, y han repetido varias veces. ¿Cómo te puedes resistir a un tío que está tan bueno y encima lo sabe y te provoca?, es algo muy difícil.

Ella se está vistiendo con tranquilidad, cree haber sido expulsada del mundo real y que ahora, lo que acaba de pasar y lo que esta sintiendo, lo está viviendo en el paraíso. Termina de vestirse y le mira a él, el último había sido en el suelo, asique está completamente desnudo mirándole con una sonrisa que vuelve a dejar ver esos hoyuelos en las mejillas. (_____) se recuesta a su lado y él gira la cabeza sonriente. No, no se ha podido enamorar de ella, no te puedes enamorar del clásico polvo rápido. Pero ella ha sido revoltosa, provocativa, juguetona y dulce, muy dulce también. 

-¿Podrías liberarme?.- pregunta con carita de pena (_____).
-No, te voy a raptar de por vida.- le vuelve a besar.

____narra Harry___

¿Qué coño estás haciendo Harry?, ¿ahora le vuelves a besar?. Anda, vístete y que se marche. Sí, que se marche, porque como vuelva a oler su aroma a canela le voy a tener que raptar de verdad para siempre.

-¿De por vida?, ¿crees que no vendrán a reclamarme?.- dice y aunque no lo parezca sabe hacerlo con picardía. 
-Eso me da igual.- mi cuerpo actúa sólo esta vez y le estrecho entre mis brazos.
-Puedo venir a comprar cada fin de semana.
-Sí, estaría bien.- y tanto que bien.

Se levanta de mi lado y procuro vestirme con rapidez, me va a tocar quedarme más tiempo, limpiar el desorden y hacer que parezca no ha pasado nada. Le indico la puerta de atrás, para así no tener que abrir la persiana. Se me queda mirando por un rato y antes de que se marche tiro de su mano hasta hacer que se pegue a mí. Ni sé que cojones me pasa ni sé que tiene que me atraiga tanto. 

Y de un ligero movimiento nuestros labios se encuentran por última vez ese día.